Te platicamos sobre la anarquía relacional y por qué es importante para las personas LGBT+.
Si sueles leer sobre relaciones abiertas y poliamor, es muy probable que tengas alguna noción de lo que es la anarquía relacional y su vínculo con la comunidad LGBT+. De manera muy concreta, la anarquía relacional es una de las muchas alternativas a la monogamia y a la construcción del amor romántico.
Aunque forma parte de las dinámicas de varias parejas, no hay muchos estudios al respecto. O al menos no con dicho término. Eso no ha evitado que el tema haya sido discutido dentro de los entornos académicos. Por ejemplo, en 2020 el profesor Juan Carlos Pérez Cortés (Universitat Politècnica de València) publicó el libro Anarquía relacional. La revolución desde los vínculos. Este texto es precursor en el abordaje histórico y teórico del concepto. Es de los muy contados esfuerzos bibliográficos que están en español. CONOCE LAS DIFERENCIAS ENTRE POLIAMOR Y RELACIÓN ABIERTA.
Una explicación más a detalle
A lo largo de más de 370 páginas, Pérez Cortés rescata los sucesos y planteamientos que suscitaron la formulación del término. De acuerdo con el también director del Instituto Universitario Mixto de Investigación, su historia tiene por lo menos 200 años. Planteado desde la teoría anarquista, se le presenta como:
- Propuesta afectiva.
- Modelo de convivencia que desafía a instituciones como el matrimonio o a constructos como lo son los roles de género.
- Una de las dimensiones de las llamadas «relaciones radicales».
- Crítica a las «calificaciones estandarizadas de las relaciones».
Datos históricos
Además de la amplia tradición del pensamiento anarquista, Pérez Cortés ubica un momento clave en la formulación y praxis de la anarquía relacional: el Anarkistfestival de 2005. Con sede en Estocolmo (Suecia), este era una serie de conversatorios y talleres en las que se hablaba del legado de figuras como la anarquista Emma Goldman.
Entre las actividades de ese año destacó la de Andie Nordgren y Jon Jordás, quienes estaban platicando sobre las posibilidades de pensar y vivir los vínculos fuera del amor romántico. Aunque en ese entonces tocaron algunos puntos referentes al poliamor, dejaron claro que no es lo mismo que la anarquía relacional. CHECA QUÉ SIGNIFICA ‘AGORAGAMOUS’, CONCEPTO CLAVE DE LAS RELACIONES ABIERTAS.
De esta discusión en compañía de 50 personas, surgió el Breve manifiesto instructivo para la anarquía relacional (2006). Algunos de los puntos más importantes de este material son:
- Más que clasificar a las personas y relaciones, es imprescindible apreciar nuestras conexiones con las demás.
- Las relaciones son independientes y autónomas.
- Los sentimientos hacia alguien no son una justificación para ejercer un control sobre su vida.
- Es posible interactuar y respetar las convicciones propias.
- El heterosexismo es uno de los sistemas normativos que buscan instaurar las narrativas de lo que es el ‘amor verdadero’.
Propuesta queer, arromántica y asexual
Si bien todos los rubros son relevantes, es este último el que nos ayuda a entender el vínculo entre las personas LGBT+ y la anarquía relacional. En principio, es primordial recordar que Andie Nordgren se identifica como una persona queer. Además de llevar la autoría del manifiesto, se encargó de la divulgación del tema. Abrió un blog e hizo algunas contribuciones en Wikipedia.
También estuvo en el equipo organizador del foro Interacting Arts. En este evento fue donde varias personas contribuyeron a la identidad gráfica del concepto. La propuesta de este grupo de jóvenes llegó hasta España. En su mayoría, se discutía en grupos de Facebook en los que estaban personas poliamorosas.
Aportes a la(s) teoría(s)
Para 2010, el término anarquía relacional se coló entre las y los docentes que tenían curiosidad en entenderlo desde los planteamientos de Anthony Giddens, Chantal Mouffe, Zygmunt Bauman y Sasha Roseneil. Fue precisamente a través de las interpretaciones de Roseneil que se pudo rastrear una articulación más clara entre la anarquía relacional y el movimiento LGBT+.
En este punto, la herramienta más útil para entenderlo fue la teoría queer. ¿El motivo? Se encontraron similitudes más que sustanciales. Una de ellas fue la crítica a las perspectivas dicotómicas. De acuerdo con las personas LGBT+ que creían en la anarquía relacional como una alternativa política, las relaciones sexoafectivas y de amistad no tenían por qué ser planteadas desde el binarismo.
Sumado a la propuesta de otro tipo de vínculos, uno de los aportes más grandes de estos grupos fue que manifestaron su rechazo a que se privilegiaran unas relaciones sobre otras. En este sentido, era fundamental hablar de privilegios y de cómo están sujetos a categorías como la orientación sexual, identidad de género y prácticas de intimidad.

Pero la intrínseca conexión con la teoría queer no es la única razón para pensar en la anarquía relacional como una utopía de la comunidad LGBT+. Aquí también se encuentra el papel que desempeñaron colectivos de personas asexuales y arrománticas. Mientras desde el espectro asexual se buscó recordar que el sexo no es ni el único ni el valor más importante para medir las relaciones, les arromántiques hicieron una fuerte crítica a las nociones hegemónicas del amor. MIRA QUÉ ES LA AMATONORMATIVIDAD Y CÓMO AFECTA LOS VÍNCULOS AFECTIVOS.