El Olimpo era un nido de dioses griegos LGBT+ que le daban rienda suelta a su sexualidad sin prejuicios. Conoce algunas de sus historias.
El imperio gay ha sido una fuerza poderosa desde los tiempos en que los dioses griegos LGBT+ tenían aventuras con otros dioses o seres terrenales. A ellos poco les importaba el qué dirán, ni de sus otros amigos olímpicos, ni de los terrenales, ni de sus parejas en turno. Porque eso sí, eran muy open-minded.
A continuación te dejamos algunos de nuestros mitos favoritos sobre los dioses griegos LGBT+ y otras criaturas:
Eros
Eros era uno de los hijos de Afrodita y protector de la cultura homosexual y el amor entre hombres. Era parte de los Erotes, un grupo de dioses que propiciaban el amor. Eros es la contraparte griega del Cupido de la mitología romana.

Dioniso
Era el dios del vino, la fiesta y la fertilidad. Dioniso sostuvo distintos romances con hombres. En los relatos destacan el sátiro Ampelos y el guapísimo mortal Adonis. Su contraparte romana es Baco.

Artemisa
La diosa de la virginidad. Era hermana melliza de Apolo. En los relatos se mencionaban constantemente su amoríos con ninfas como Cyrene, Atalanta y Calisto. Para demostrar su devoción a Artemisa, Calisto juró permanecer virgen y no ser tentada ni siquiera por el mismo Zeus. Calisto terminó rompiendo su juramento, pues Zeus abusó de ella disfrazado de Artemisa.

Aquiles
Aquiles no era un dios griego LGBT+, pero sí un héroe. Además de tener talones frágiles, los hombres griegos fornidos eran otra de sus debilidades, así como su íntimo amigo Patroclo. Aunque nunca se habló como tal de una relación homosexual, detalles en los escritos apuntan hacia un romance. Pero los dioses LGBT+ decretaron que eso no duraría mucho. Su amor les sería arrebatado en la batalla por el príncipe troyano Héctor, quien mató a Patroclo. Aquiles, en un arranque de ira, vengó su muerte y asesino a Héctor.

Tiresias
Podríamos decir que Tiresias fue la primera persona trans en la mitología griega. Se cuenta que la diosa Hera lo castigó y transformó de hombre a mujer por siete años. Durante ese tiempo, Tiresias se convirtió en sacerdotisa de Hera, se casó y tuvo hijos. Después de cumplir con su ‘castigo’, los dioses acordaron regresarla a la forma anterior.

Pan
De entre los otros dioses griegos LGBT+, el apetito sexual de Pan era inmesurable. Acechaba por igual tanto a ninfas y doncellas como a hombres. Distintos textos mencionan que se enamoró del pastor Dafnis, a quien enseñó a tocar su flauta. Este dios le puso el pan a pansexual. *Ba dum tss*

Hermafrodito
Es una de las primeras personas intersex de las que se tiene registro en la literatura. Su nombre es una fusión de los nombres de sus padres, los dioses Hermes y Afrodita. La ninfa Salmacis estaba enamoradísima de él, hasta que un día lo arrastró al fondo de un lago. Suplicó a los dioses que nunca fueran separados y fue así como sus cuerpos terminaron unidos. A Hermafrodito se le muestra con senos y genitales de hombre.

Las Amazonas
Muchas podrían pensar que una sociedad únicamente de lesbianas sería una fantasía. Y, aunque no eran parte de los dioses LGBT+, las Amazonas sí lograron vivirla. Ellas tenían esclavos hombres que secuestraban de poblados vecinos o que eran prisioneros de guerra y reservaban el sexo heterosexual únicamente con fines reproductivos.

¿Te imaginas vivir en una civilización que adoraba a dioses griegos LGBT+?
Con información de Out Magazine, Hornet y Portal Clásico